En el V Encuentro Internacional de Investigación en Artes, que se realizó del 20 al 25 de julio de 2020, el conversatorio “Ciudad, política y subversión” le siguió a la inauguración de la muestra MONOSGRAFIA y de algunas presentaciones de videos experimentales de estudiantes de la Universidad de las Artes. La cita abordó la temática “Cultura y Comunidades”, participaron Carola Ureta (CHI), María Fernanda López (ECU), Miguel Bouhaben (ESP); su anfitrión, Francois Laso, director del Centro de Innovavión y Producción MZ14 de la UArtes.
“La ciudad como texto” lo presentó la diseñadora de proyectos editoriales Carola Ureta, pero primero creyó pertinente contextualizar el por qué y para qué se originó, contando así la crisis que vivió Chile el 18 de octubre de 2019. El reclamo se dio por el descontento ciudadano por la vulneración de sus derechos en salud, educación, alza tarifa de transporte público, etc. En el denominado Estallido social en Chile se tomaron avenidas, para protestar en conjunto y en un espacio compartido. Lo que realizaron en las paredes de las calles “se ha ido conformando por distintos grabados a modos de tatuaje de mensajes de códigos que han sido parte de lo que se puede considerar una bitácora del despertar social”. No solamente se tomaron los muros, sino que “la oralidad callejera se traspasó a suelos, letreros”.
El gobierno actuó en contra, haciendo un blanqueamiento con finalidad de borrar todo, como que si nunca pasó nada. “Aquí en cuarentena, donde hemos pasado encerrados; el silencio en las calles ha sido notable porque todos están en las casas. Han pintado los muros para borrar esta historia”. Ya realizada esta acción, pareciera que han cumplido el acometido, pero no es así, gracias a “La ciudad como texto” ha quedado un registro fotográfico de 2.4km y 136 imagénes desde La Alameda hasta el Palacio de la Moneda. La lectura no es lineal y cada uno puede ir hilvanando su propio tejido colectivo. El recorrido es virtual y hay también un montaje físico hecho a mano. Además, a 36 personas de diferentes disciplinas se les pidió que escribieran una nota al pie, estas se hacen visibles al dar click en los asteriscos a lo largo del recorrido, entre ellas está María Paulina Soto, rectora de la Universidad de las Artes.
Francois Laso cerró este diálogo con la idea de que blanquear la ciudad no es tan fácil y la siguiente expositora la retoma para explicarla desde otro punto de vista. Para María Fernanda López, curadora, investigadora, activista, gestora de cultura urbana y docente de la UArtes, la ciudad se blanquea fácilmente porque los policías exigen que así sea, pero nada de eso importa, ya que no la detiene. Ella explicó que “Pandemia gráfica” nace alrededor del mes de mayo del 2020 en Guayaquil con varias dimensiones, las cuales tienen que ver con la pedagogía de la praxis, además de la situación que ella estaba pasando personalmente a partir del confinamiento. Se unió al graffitero Made para recorrer en bicicleta Guayaquil y rayar las calles con temáticas del COVID-19, la educación pública, los políticos; con frases destacadas como: Aguanta educación pública, No al recorte, Fuera COVID 19, Perdí la memoria, Vivo en otra realidad.
María Fernanda López lleva 13 años estudiando arte urbano, pero desde el acompañamiento, ahora que está sumergida completamente, entiende y respeta al movimiento graffitero, que es un tema existencialista desde una filosofía profunda, por tal, le molesta cuando lo intentan reducir con cuestionamientos sobre si es arte o vandalismo.
Hace una comparación con Chile, un país donde el arte urbano es importante con su trasfondo político, ocupación del espacio público y porque genera una memoria colectiva, lo que no pasa en Ecuador, específicamente en Guayaquil, donde los muros rayados no producen nada en las personas y ellas tampoco tienen una memoria colectiva, por tal, siguen votando por los mismos gobernantes.
Existe tanto una dimensión estética como una política, al ser una docente se pregunta “¿qué es lo que estoy enseñando? Pero todo tiene una justificación desde lo teórico, práctico y humano.” Anima sus estudiantes de Gestión y política de la cultura y de Arte urbano que sí se puede, sin importar lo que está ocurriendo alrededor, solamente se necesita “un sentimiento de entraña que no está en la bibliografía, que no está en el marco teórico” la PHD les habla desde su propia vivencia “es una pedagogía testimonial que el moddle no soporta”. El proyecto acoge a quien quiera sumarse o recepta colaboraciones de materiales.
Miguel Bouhaben, doctor en Comunicación Audiovisual presenta “Fragmentos por venir”, tiene base en el paro nacional de octubre de 2019 en Ecuador, pues se trabaja con los videos que los estudiantes recolectaron de redes sociales, televisión y hasta tomados por ellos mismos, lo que no fue tarea fácil porque resultaron fuertemente agredidos. Lo que también ocurrió fue que las personas no querían compartir sus imágenes, ya sea por miedo a las represalias de parte del gobierno o porque con su material querían trabajar de manera autónoma.
El proyecto fue realizado con los estudiantes de las materias Teoría y crítica, Filosofía y cine e Investigación en cine, dictadas en la UArtes. En la primera entendieron la diferenciación en cuanto al tipo de registro: el no militante, hecho desde los balcones sin estar directamente entre lo que está ocurriendo, la de los fotógrafos independientes que es desde lo artístico y oscila entre lo estético y lo político, también los fotógrafos que responden al gobierno buscan redefinir lo real, crear, forjar el acontecimiento (…).
El docente-investigador explicó que hay etapas que hizo junto a los estudiantes: investigación, creación, distribución de la película y de la propia investigación. Es así que “Fragmentos por venir” se ha presentado en el Festival de Cine Latinoamericano de Touluse, Festival de Cine de Portoviejo y actualmente está postulando a varios festivales internacionales, y tienen papers publicados en la revista francesa Cinémas d’Amérique Latine y en la Revista Cine Documental, de Argentina.
Finalmente, los participantes coincidieron en que en sus proyectos hubo relación con el silenciamiento, la manipulación y la censura. Carola Ureta citó a Cecilia Vicuña porque considera que su idea de arte como motor político traspasa todo lo presentado en el conversatorio. María Fernanda López estimó que a “Pandemia gráfica” también se le necesita hacer un registro pero que no se dan abasto, así que espera que alguien se una para hacer esa parte del trabajo. Y, Miguel Bouhaben opinó que es importante moverse de un lado a otro, estar desde el lado de la academia y también desde la calle.
La ciudad como texto: https://www.laciudadcomotexto.cl/