Nikita Félix
«Y el reencontrarse con esa tristeza del inevitable fin, es uno de los motores para seguir buscando construir esas narrativas absurdas en la producción». Sigo tratando de continuar con una de las obras que estoy realizando. Como en un envolvente “loop” me detengo al recordar que han pasado 21 días desde que uno se reencuentra con lo efímero de los lazos entre la construcción de una familia. Ver morir a un familiar que estuvo presente en tu vida por 27 años, reconocer su cuerpo en la morgue y hacer procesos frívolos para que no ocupe espacio en la morgue me lleva a cuestionarme diariamente si vale la pena el continuar “construyendo” ese ideal de vivir en un lugar mejor.
Me dijo una vez un conocido luego de salir del hospital en este glorioso año: «si lo piensas con cierta perversidad, los seres humanos somos el perfecto ejemplo de obsolescencia programada». Debo admitir que me he quedado con esa frase, ya que se ha convertido en ese pequeño guijarro que uno no quiere ver, pero que no deja de estar presente por voltear el rostro hacia otra dirección. Así remata la frase: «Dentro de esta situación tan pesada, aprovecha para leer cosillas», ahí parte mi obsesiva producción, el sacar provecho de ese descontento.
Las fotografías de aquellos momentos me hacen sentir culpable, ya que en ocasiones las observo, las analizo y las deconstruyo para continuar produciendo y estas me llevan a las calles a buscar otras conexiones hacia esa ejemplificación de lo que evidentemente se volverá obsoleto. Como la arquitectura, aplica conceptos estéticos y utilitarios que solo funcionan por cierto periodo de tiempo. En 20 o 30 años empezaran a desaparecer, oxidarse o simplemente estar camuflados entre el abandono.
En ocasiones me planteo ejercicios de restructuración de mis procesos antiguos, con la finalidad de poder brindar un paso más allá en lo que ya tenía avanzados desde “Proyectos del Cajón”.
El trabajo sobre una estructura de yeso en combinación con otros materiales que puedan generar aproximaciones a ciertas sensaciones orgánicas, pero tras meses de reposo, lo hace inutilizable porque esto me ha brindado un resultado completamente opuesto a lo esperado, dejando de lado la textura aislante a una pegajosa e inservible.